Casi 20 años dedicados a ayudar a mejorar la salud de las personas a través del estudio de la fisioterapia y la osteopatía. Nacido en Aspe ya desde muy pequeño mis padres me inculcaron el espíritu de trabajo y superación continua. Estudié fisioterapia en la Universidad Miguel Hernández de Elche. Hice prácticas en varios hospitales, mutuas y colegios. Allí conocí algunos grandes profesionales entregados a sus pacientes que me hicieron ver lo importante que es en nuestra profesión, y en la vida, la empatía.
La globalidad y la capacidad de detectar cuál es la causa de los problemas de mis pacientes me llevó a buscar respuestas en el apasionante mundo de la osteopatía de la mano de los profesores de la Escuela de Osteopatía de Madrid (François Ricard). La osteopatía así pasó a ser la filosofía en la que baso mi trabajo.
Pude trabajar mano a mano durante 4 años con algunos de mis profesores en el Hospital General Universitario de Elche. Allí aprendí en varias unidades como la Unidad de Mano (con el Dr. MacKenney), amputados, linfedemas, traumatología, neurología, unidad de espalda… construyendo así la base de mi experiencia clínica.
Cada paciente te enseña algo nuevo, disfrutas de los buenos resultados y aprendes de los no tan buenos. Te hace consciente de lo mucho que nos falta por aprender. Por ello la formación continua en nuestro trabajo es fundamental, buscar soluciones con nuevos métodos, conceptos y técnicas de tratamiento. Todo ello me permite ayudar cada vez mejor a las personas que deciden que sea yo quien les ayude a mejorar.
Cuando acabaron los primeros años de trabajo en hospital, creí que la mejor manera de seguir ayudando a mis pacientes y perfeccionando los conocimientos y habilidades que iba adquiriendo era crear un centro propio. Con mucha ilusión decidimos crearlo en 2005.
La globalidad es la base en mis tratamientos, por ello compaginé los estudios de osteopatía con el concepto de Cadenas Musculares GDS (Philippe Campignion). El enfoque psicocomportamental de la postura y la biomecánica me abrió un nuevo camino, la psique y la emoción alteran el funcionamiento del cuerpo. Quise reforzar este concepto con kinesiología de la mano de la escuela KineVida de Montmeló, que añadieron un nuevo elemento al cóctel de la salud: la energía.
Al terminar mis estudios de osteopatía reforcé mi trabajo en terapia manual musculoesquelética con varios métodos de terapia manual como McKenzie, McConnell, Mulligan, terapia fascial (Andrea Turrina, Andrey Pilat…) complementándolo con otras técnicas (Kinesiotape, neurodinamia, Drenaje Linfático…).
He cursado másteres en Fisioterapia deportiva en la Universidad Internacional de Cataluña (2003) y en la Universidad Cardenal Herrera CEU (2009).
Decidí afinar mi precisión en habilidades manipulativas realizando la formación GEPRO con el prestigioso osteópata Jean-François Terramorsi. Con él aprendí a gestionar la manipulación con mínimo impulso.